Shirakura sí que quiere matar la franquicia tan pronto como pueda, o al menos hacer que pierda hasta lo más mínimo que le queda de prestigio. Primero reemplazando el sentido de humanidad con personajes vacíos que se comportan y lucen como personajes de algún anime de pacotilla, y ahora directamente reemplazando trajes tangibles por personajes de caricatura (y hasta ahora los bobos se creen su cuento de que quiere “innovar”). Y a pesar de esto y que tengan que lidiar con los típicos juguetes estúpidos de Bandai que se ven horribles, DonBrothers es de hecho una enorme mejora en el aspecto visual comparado con el aspecto general monótono, barato y sin inspiración de Zenkaiger. Les juro que Kiramager y Zenkaiger son lo peor que Super Sentai ha sido en cuanto a dirección artística, por lo que es refrescante ver el regreso del estilo de dirección y cinematografía de Ryuta Tasaki, un veterano en el género. La escena del primer encuentro entre Haruka y Sonoi en la noche fue lo más interesante que se ha visto en Super Sentai desde hace unos años, así como esas alucinantes visiones del mundo de los Anonis. Y por supuesto que aprecio los diseños de monstruos de Tamotsu Shinohara, mucho mejor que esas pobres excusas de monstruos de la semana de las dos series anteriores (“son un homenaje a Goranger”, mis cojones).
Supongo que debería empezar a hablar del aspecto más discutido de esta serie: el regreso de Toshiki Inoue como guionista. No voy a ponerme a contar la larga y caótica historia de este hombre en esta entrada, pero su reputación entre los fans acérrimos del tokusatsu debería ser suficiente para que al menos ese grupo me entienda en lo que voy a decir. Yo estimo mucho a Inoue, y creo que sus aportes al género no deberían ser menospreciados por mucho que haya cometido errores o directamente haya empeorado series adrede por varias razones. Él ha traído un sentido de drama y realismo inédito en varias franquicias, creando personajes verdaderamente humanos, creando situaciones en las que estos muestren sus emociones y tengan que madurar, así como construyendo en general buenos misterios y trayendo mucha crudeza y humor peculiar. No obstante, no creo que el simple hecho de que haya vuelto signifique que DonBrothers vaya a ser una gran serie. Claro que los diálogos más elaborados y el progreso más dinámico entre escenas ya ponen fácilmente en vergüenza a todo el trabajo de Arakawa y Komura en las dos series anteriores, pero no sé cuánto Shirakura, Takebe y Bandai vayan a restringir su creatividad y visión a largo plazo sobre la serie, algo me dice que todo este “misterio” sobre Sonoi y los demás podría terminar siendo un fiasco, y aunque no estoy de acuerdo con muchas de las críticas sobre “malentendidos” y “dramas forzados” en Kamen Rider Faiz, creo que alargar esta parte de Haruka no pudiendo identificar a Taro como DonMomotaro sí es algo estúpido y molesto. En general, dudo mucho que DonBrothers vaya a estar a la altura de las mejores obras de Inoue.
Para ser franco, ningún personaje me ha gustado mucho hasta ahora. Haruka no está mal, me gusta que tengamos a una protagonista más ordinaria, pero de nuevo, eso de no querer creer que Taro sea el que busca la hace ver como una tonta. Taro es un mejor intento de un protagonista optimista y de buen corazón que varios de sus predecesores, pero la parte pomposa de DonMomotaro fácilmente podría salirse de las manos y volverse molesto, así como todo el misterio sobre su origen y conexión con los demás. Shinichi tuvo buenas líneas, pero no me termina de convencer esa premisa de que “no tiene ambiciones”, aunque sí veo potencial. No tengo esperanzas en Inu y Kiji, no solo por lo atroces que se ven transformados, sino porque sus premisas son tan jodidamente estúpidas. Uno es un hombre casado que sólo es un perdedor, y el otro un supuesto criminal que es imposible de tomar enserio sabiendo que se transforma en un perro de caricatura. (Y el pobre Kiji está condenado a travestirse cada vez que hace esos Avataro Change.)
Hablando de eso, el aspecto de aniversario me parece tan vacío e innecesario como en Zenkaiger, sólo se transforman y ya, no van más a fondo con el tema e historia de esas series. Aunque por lo menos no hemos tenido otro de esos momentos de escupir sobre el legado y prestigio de esas series que abundaban en Zenkaiger. Pero sabiendo que Shirakura sigue a cargo de esta serie, y que le gusta ridiculizar a la franquicia y a los fans, no descarto que en algún momento pase algo que me haga odiar esta serie. Considero que DonBrothers tiene potencial para ser cuanto menos memorable, pero que hay muchas cosas que podrían salir mal y la parte visual ya se encuentra seriamente perjudicada. Aun así, pueden apostar que los fans complacientes van a defender esta serie a muerte aún si se vuelve una bosta, porque a este punto Toei podría sacar literalmente una bolsa de basura que lleve escrito “Super Sentai 2023” y los fans complacientes lo aceptarían y atacarían a todos los que digan algo malo de éste. “Es una serie para niños”, entonces tú deja de ver la serie porque no eres un niño, pendejo.