viernes, 31 de diciembre de 2021

Palabras de 2021

 

Literalmente estoy escribiendo esto a tan solo un par de horas de terminar la entrada anterior, con toda la intención de terminar el año con algo que decir. Admito que es mi culpa que el sitio no haya estado muy activo como quería desde un principio, ya que no es como si hubiese muy estado ocupado recientemente. Qué he estado haciendo… o mejor dicho, ¿cómo me ha ido este 2021? No quiero entrar en detalles sobre nada de mi vida personal, pero puedo describir a este periodo como… extraño, surrealista, como un sueño… e insignificante. Supongo que es lo que pasa cuando dos de tus hermanos desaparecen de tu vida repentinamente y hay suficiente indolencia por ambas partes como para no tratar de darle la debida importancia o llenar el vacío con algo productivo. Dejando de lado esas cosas personales que a nadie le importan, pasemos a lo que trae esta peculiar entrada: todas las cosas destacables que me han pasado este año, o al menos las que quiero contar en esta ocasión.

El inicio de Neo Seishun Road


Sé que esto es obvio, pero vamos, claro que esto fue muy importante para mí. Había estado planeando tantos nombres para el sitio, pensando en tantos diseños, pensando en qué otros temas podría abordar, y al final todo ha salido mejor de lo que esperaba. La primera mitad del año sí fue un tanto incómoda ya que prácticamente estuve obligado a preparar la inauguración debido al repentino declive de las comunidades a las que pertenecía y que la única en la que aún estaba activo (la de Super Sentai) era una orientada a un tema en el que no me encontraba muy emocionado últimamente. Aun así, la última trilogía hecha para esa comunidad fue bastante extensa y satisfactoria de hacer, y desde que empecé a escribir para este sitio el largo de mis artículos no ha decrecido, por el contrario, muchos de estos han sido aún más largos y trabajosos, y estoy muy contento con cómo han quedado en general.

En esta entrada de bienvenida no di una muy precisa descripción sobre los planes que tenía para Neo Seishun Road, pero creo que la vibra general que quiero darle al blog es una peculiar y extravagante, que abarque temas muy poco conocidos y que resalte lo más interesante o genial de cada uno de estos. Básicamente, escribo sobre cualquier cosa que me parezca atractivo, y dar mi sincera opinión sobre ésta. Aunque sigo pensando que las cosas siempre pueden cambiar y no descarto la posibilidad de que Neo Seishun Road algún día se vuelva algo completamente diferente. Quién sabe.

Que se joda Zenkaiger



Esta es la jodida razón por la que he estado tan hastiado con Super Sentai y el tokusatsu últimamente. Nunca en mi vida había visto que una franquicia haya sido entregada a alguien que tiene tanto desprecio hacia ésta e intencionalmente haga un producto para hundir el nombre de la marca y burlarse del legado de esta y de los fans. Godzilla Final Wars al menos fue hecha por alguien que se consideraba fan de una parte de esa franquicia y nos dio al menos un espectáculo estilizado y entretenido que hizo ver imponente al personaje; pero lo que el productor Shinichiro Shirakura hizo para el 45 aniversario de Super Sentai no es más que una burla hacia la franquicia.

Haber visto este año tanto la primera serie de la franquicia como la última sí que hace notar lo arruinada que se encuentra la franquicia cuatro décadas después. He visto cómo Goranger se tomaba totalmente enserio el aspecto de historias de superhéroes y hacía algo genial y competente. Di lo que quieras de “Super Sentai siempre fue infantil”, pero no niegues que en Goranger los villanos asesinaban a sangre fría a varios soldados de Eagle para probar que son una verdadera amenaza, y cada uno de los planes de los monstruos Kamen de la semana era para algún objetivo verdaderamente importante y malévolo, como el desarrollo de armas genocidas o robar recursos importantes. En Zenkaiger los protagonistas literalmente no tienen nada de heroicos y nunca se enfrentan a ningún desafío. Todos los monstruos de la semana son un montón de ineptos con planes ridículos y absurdos, y los Zenkaiger no les ganan ni peleando ni ideando algún plan sino usando sus Sentai Gear (conveniencias argumentales) y haciendo “chistes” nada elaborados o ingeniosos que no dan más que vergüenza ajena.

Junko Komura ya había probado en Lupinranger VS Patranger que es un asco escribiendo episodios de comedia, y Zenkaiger es prácticamente esos penosos episodios repitiéndose semana tras semana, solo que de alguna forma peor. Cada vez que Zenkaiger pretende hacer algo remotamente similar a una historia, evocar algún sentimiento u otra tradición Sentai, falla miserablemente y no podría dejar más en claro que los que la hicieron no están intentando para nada. Está ese tal Stacy, quien se ve como un maricón y tiene la presencia de un payaso ebrio que piensa que hace su trabajo pero solo hace el ridículo, y que a pesar de no haber hecho nada realmente maligno la serie piensa que merece “compasión” o un arco de redención. (Dios, extraño cuando guionistas como Hirohisa Soda nos daban antagonistas verdaderamente geniales y entrañables, como Yamimaru de Turboranger.) ¿El power up ese? Aparece literalmente de la nada y no es usado contra un enemigo que realmente haya sido una amenaza para el equipo, por lo que no hay nada triunfal o simbólico en este (y su diseño es horrendo, como es la norma para esta serie). En cuanto al pirata maricón y a la otra, ¿realmente esperan que eso de que sus hermanos se hayan vuelto juguetes (que no se ven nada tristes por eso) sea un punto dramático?

Todo lo demás que dije sobre Zenkaiger en marzo aún aplica, como los personajes siendo unos imbéciles unidimensionales (no hay nada de genial en un grupo de idiotas que consiguen cosas sin trabajar, a esos se les llama perdedores holgazanes), pero solo puedo agregar más del aspecto de aniversario – o mejor dicho, el cómo NO celebra el aniversario. Mucho se ha hablado de ese aborrecible episodio en el que hicieron una burla del final de Jetman, y pues claro que me pareció indignante, pero he estado diciendo desde el principio que todas las referencias que hacen a los Sentai pasados no son más que burlas y demuestran todo el desprecio y falta de respeto que tienen los creadores (principalmente Shirakura) hacia la franquicia. Cada uno de estos homenajes es tan insignificante y no hace sentir nada (como el poder de Maskman que hace levitar, el cual se puede ver en el opening de esa serie), y algunos directamente son muestras de odio hacia temporadas anteriores. No me importa que Stacy haya “creado copias malvadas”, el ver a los actuales Zenkaiger atacar y vencer guerreros Sentai pasados es irrespetuoso y nada más.

Hombre, recuerdo que cuando empecé a ver Super Sentai por allá en 2015 me había propuesto el ver todos los Sentai existentes y la única forma en la que dejaría de ver sería si esta perdiera su identidad, como por ejemplo, si dejara de ser Live Action y se volviera anime. Hasta este punto, ¿Zenkaiger no es ese cambio drástico que debería hacerme abandonar la franquicia? Digo, esta ya no tiene personas sino robots parlantes que no me importan. Estarías en lo correcto si asumieras que DonBrothers muy probablemente también vaya a ser otra serie nefasta con sus diseños horrendos y personajes de caricatura, pero yo por mi parte tengo un poquitito de esperanza de que por lo menos va a ser mejor que Zenkaiger. Ya he dicho que echaba mucho de menos a las amarillas (¿puede que me guste superficialmente?), y el guionista Toshiki Inoue puede que nos de algo un poco interesante, aunque siento que él va a estar como Komura y se va a portar de forma cínica y no poner nada de empeño en esa serie.

Juegos de pelea


SNK Vs. Capcom. No sabía que existía, pero realmente lo necesitaba en mi vida.

Esta es otra de las cosas que me gustan para saciar mis ganas de peleas emocionantes y varoniles aparte del tokusatsu. Este año por fin he decidido probar los juegos de pelea de Capcom (principalmente Street Fighter), lo cual sumado a que he recuperado mis emuladores de Neo Geo y Playstation 2 han revivido mi pasión por estos juegos y sorprendentemente he mejorado mucho y llegado a comprender los principios de estos. Cada uno de estos juegos es un nuevo mundo para mí, descubrir el lore, aprender a usar a cada personaje, aprenderme estrategias para cada enfrentamiento, todas esas cosas competitivas.

Tal como la imagen debe haberte dado a entender, una de las cosas más destacables también ha sido jugar los crossovers de Capcom Vs. SNK, aunque principalmente he estado jugando el SVC Chaos ya que estoy más familiarizado con el estilo de los KOF. No es un juego perfecto, pero tiene una peculiar selección de personajes y una atmósfera oscura como me gusta, además del intenso sistema de combate y lo largo y desafiante que es el modo arcade. Me he pasado muchas horas jugándolo, quizás más de lo que debería.

Y sí, estoy emocionado por el nuevo King of Fighters XV y estoy pendiente de lo que anuncian sobre este.

“Hug” de BOL4



La voz de Ahn Jiyoung. <3

Ahora vamos con algo totalmente distinto. No sé absolutamente nada de BOL4 (o Bolbbalgan4, como quieras), por lo que, ¿qué hago recomendando esta canción tan random? La razón tiene que ver con la historia del cómo la descubrí y no sobre esta en sí (ya que ni siquiera es una canción de este año). La historia sobre… el día en el que una youtuber me hizo caso, y me “dedicó” esta canción. En uno de sus videos yo le comenté que la canción en particular que usó –de Bolbbalgan4– me encantó. Era un comentario insignificante en un video que ella había subido hace un par de años, no había forma que ella lo note… pero sí lo hizo. Ella no me respondió o algo así, sino que en su próximo video –subido un par de días después de mi comentario– usó justamente otra canción de BOL4: “Hug”. Realmente no lo podía creer, ella prácticamente hizo un video para mí… mis sentimientos de fanboy habían subido a un punto nunca antes visto. (También le comenté en ese video, pero tampoco me hizo caso.)

En cuanto a Hug, es una canción dulce y relajante, sí que la recomiendo. (Y el videoclip es lindo, supongo.)

El canal aún no está muerto


¿Hay alguien aquí que haya conocido Neo Seishun Road por mi canal? Si lo eres, seguramente recordarás que en abril subí un video, por lo que el canal aún no está muerto. Admito que la historia no fue la mejor, pero lo hice principalmente para divertirme y cómo una práctica para mis próximos videos. Porque sí, van a haber nuevos videos. Aún tengo pendiente el resto de la historia (si es que el autor decide continuarla), y puede que decida hacer otra clase de videos. (Quizás un día haga otro MV de un mecha de Super Sentai.)

No me gustó Godzilla Vs. Kong…


Relacionado al punto anterior: sé que algunos aquí son fans de Godzilla y se preguntarán qué es lo que pienso de este reciente crossover. La semana en la que salió justo llamé a un amigo que también es fan a que venga a verla conmigo, y vaya… fue una reverenda estupidez. Recuerdo que cuando salió la película de Gareth Edwards en 2014 todos estaban diciendo que esa era la mejor de toda la franquicia solo por ser la más “realista” y “oscura” de todas, mientras que las de Toho se ven ridículas y baratas. Años después, Godzilla Vs. Kong es una de las películas más estúpidas y absurdas que he visto, tanto por la historia tonta y forzada como que ningún personaje humano parece tener sentido común o siquiera neuronas – esta cosa está al nivel de Transformers 4. Aunque no me parece la peor película de Godzilla.

…pero al menos volví al cine


Es lo que más extrañaba desde el año pasado. Claro que en mi país el cine tardó un poco en volver (como a mediados de este año), así como que las recientes películas de acción tiendan a ser un asco por querer imitar el estilo de las de Marvel (Matrix Resurrecciones en especial fue un bodrio), pero se siente tan bien tener algo que hacer al salir con mis amigos, incluso nos divertimos criticando malas películas después de verlas.

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Y bien, eso ha sido todo lo destacable que puedo decir de 2021, o al menos en lo que no concierne a mi vida personal. ¿Qué tal les ha ido este año? Para mí no fue tan malo, aunque no es como si el anterior hubiese sido exactamente una tragedia para mí como para otros. Como sea, nos vemos el próximo año. Con cariño, Emestraiker

martes, 28 de diciembre de 2021

Phantasy Star (Master System)

 

He estado esperando por este momento por tanto tiempo. Ha llegado el momento de hablar sobre mi saga JRPG favorita de todas: la saga Phantasy Star de Sega.

Phantasy Star ha sido una saga que me ha cautivado tanto a pesar de que solo me he enfocado en una porción muy específica y temprana de su historia como franquicia. Hoy en día (si eres algo friki) estarás familiarizado con los actuales MMORPG de la franquicia como Phantasy Star Online 2, o con el anime que salió hace unos años basado en este, pero estos enormes juegos multijugador competitivos me parecen ñoñerías y lo mismo pienso sobre una serie basada en algo como eso. Pero no se puede ignorar lo que llevó a la franquicia a ese punto, o mejor, sus inicios y su importancia en la industria de los videojuegos en general. Lanzado en 1987, algo tan trascendente, un proyecto tan ambicioso, muy por encima de otros RPG contemporáneos – seguro que este fue tratado con tal importancia en su momento por el público y por su misma empresa desarrolladora, ¿verdad? Pues aquí tienen un nostálgico comercial del juego.


No es la mejor publicidad, pero hay otros factores que hicieron que este juego haya pasado por alto por una gran parte de los jugadores del momento. Por una parte, este juego fue lanzado exclusivamente para la consola Master System de Sega, la cual si bien no era exactamente impopular, no tenía el mismo nivel de reconocimiento que su competidora NES/Famicom de Nintendo. La Famicom ya contaba para ese entonces con la primera entrega de la famosísima saga de juegos RPG de Dragon Quest, y solo un par de días antes de la salida de Phantasy Star también había salido el primer Final Fantasy, también exclusiva para la consola de Nintendo. También está lo obviamente costoso que era Phantasy Star al ser un juego tan grande (cuatro megabits, ¡cuánto poder…!). Pero dejando por un lado cómo le fue en su momento, he de decir que el primer RPG de Sega ofrece mucho más de lo que su competencia quisiera tener.


Al ser un juego de rol, el jugador se encuentra inmerso en el universo construido en el cartucho y su interesante historia. Phantasy Star no empieza con una premisa cursi y genérica como salvar a una princesa en un mundo medieval, sino que esta presenta una historia directamente oscura y personal. La historia se centra en Alis Landale del planeta Palma del lejano sistema solar Algol, cuyo hermano Nero fue asesinado por oponerse al rey Lassic, quien tras una fachada de ser un rey benevolente oculta intenciones malignas. Al descubrir esto, Alis embarca la misión de derrotar al tirano, salvar el sistema solar y vengar la muerte de su hermano. Desde este punto de partida, el jugador continúa desde la perspectiva de Alis, interactuando con todo el universo y personajes presentes en el juego.


Puede que sea un poco abrumador el explorar el juego por primera vez, especialmente si no estás acostumbrado al estilo de los RPG de la era de los 8-bits y por la dificultad (volveré a este punto en un rato), por lo que el juego probara tu determinación, paciencia e indagación. Cada pueblo está lleno de NPCs con valiosa información y secretos para continuar en la aventura, por lo que debes estar atento a todo esto. Hay veces en las que el juego no te dice exactamente qué hacer, por lo que el jugador tiene que experimentar para continuar. Por ejemplo, uno de los primeros objetivos es viajar al planeta Motavia para cambiar una olla de laconia por un miembro del equipo, pero para esto se tiene que abordar una de las naves espaciales, y para eso es necesario tener un documento para llegar ahí, el cual se consigue insistiéndole tres veces a un vendedor en la ciudad de Scion.


Sí, el juego es muy exigente, pero honestamente es muy difícil no estar inmerso en el juego gracias a la maravillosa presentación y lo memorable y orgánico que se siente el mundo y los personajes. Un poco después de pasar las primeras misiones del juego encontraremos al segundo integrante del equipo: Myau, un gato inteligente con buenas técnicas curativas y de apoyo al equipo. El siguiente integrante es Odin, un guerrero que también se opone a Lassic, y que en combate no usa magia pero puede equipar pistolas que hacen daño a todos los enemigos en un mismo turno, así como una que otra hacha. Y por último está Noah, el mago obligatorio del grupo, quien es un poco más difícil de hacer que se una pero tiene los mejores hechizos de todo el juego y que pueden ser cruciales en combate. Este es uno de los equipos RPG más balanceados y memorables que puedan existir, tanto como personajes como por funcionamiento dentro del juego. Es un equipo tan bueno que no necesitarás (ni desearás) a absolutamente nadie más en toda la aventura, y todos pueden ser conseguidos relativamente temprano por lo que podrás aprovecharlos por la mayor parte del juego.


Como ya dije, el juego hace un gran trabajo en plasmar el mundo a pesar de las limitaciones de la consola. La interfaz de exploración es desde una típica vista aérea, pero lo más sorprendente es que absolutamente todas las casillas del juego pueden ser vistas desde la perspectiva del personaje al abrir el menú o entrar en una batalla. El juego presenta una muy impresionante variedad de escenarios realmente detallados y coloridos – son toda una belleza para la vista. Estos incluyen ciudades, praderas, playas, campos de lava, y todas sus variaciones en los tres planetas. Las mazmorras por otra parte, tienen un diferente tipo de exploración: para estos, el juego hace uso de animaciones para simular el avanzar en una mazmorra 3D en primera persona, lo cual es de lo más impresionante que se puede ver en un juego de 8-bits de esa época – cortesía de la magistral programación de Yuji Naka. (Recuerdo haber leído por ahí que los desarrolladores al ver ese efecto de exploración pensaban que se trataba de uno de esos simuladores de vuelo.)


Aparte de lo visualmente impresionantes que son estos efectos y las animaciones, también está el sistema de combate y lo bien hecho que está. En este solo aparece un tipo de enemigo (pero pueden venir varios de este) y están las opciones de atacar con el arma equipada (se elige manualmente para cada personaje), usar magia (de ataque o de apoyo), usar un objeto o incluso tratar de hablar con el enemigo. Todo esto fluye bien y es suficientemente desafiante, pero honestamente creo que está menos optimizado en comparación al sistema de sus sucesores, los cuales hacen que combatir sea más rápido y eliminan algunas opciones innecesarias. Algo muy molesto por ejemplo, es abrir un cofre después de vencer a un enemigo común y solo recibir dinamita que te explota en la cara.



Personajes memorables, una apasionante historia, una hermosa presentación, una decente banda sonora (Tokuhiko Uwabo hizo un buen trabajo, pero sus melodías para este juego son las que menos me gustan de toda la tetralogía), es un juego muy completo… así que ahora enfoquémonos en lo negativo. Pues, como era de esperarse para un RPG de esta época, este juego no es muy accesible y puede ser abrumador para jugadores casuales, especialmente para los que están acostumbrados a los RPG modernos. Mi principal problema con esta primera entrega de la saga –el cual está presente en muchos de sus JRPG contemporáneos– es que es muy difícil tratar de averiguar qué hacer o dónde ir para avanzar en la aventura. ¿Recuerdan lo confuso que es el proceso para llegar a Motavia? Pues ese es el primero de muchos objetivos cruciales que se deben cumplir para llegar hasta Lassic. He dicho que es necesario fijarse en todo lo que los NPC tengan que decir, pero muchos de estos no dan información relevante (¡algunos directamente mienten…!) y a veces ni siquiera es suficiente con las pistas que los personajes nos proporcionan. El juego ofrece un mundo muy amplio por explorar y es necesario cumplir todos los requisitos para cumplir el objetivo, por lo que es fácil perderse o pasar por alto un elemento crucial para triunfar. Por ejemplo, para siquiera llegar al mundo nivel –el castillo volador de Lassic– es necesario tener el Aero Prisma, el cual se encuentra escondido en una cueva escondida tras montañas de hielo, y que para llegar al castillo también se necesita una nuez especial que se encuentra tras hacer todo un ritual en un árbol escondido de Dezoris. Y que incluso si has llegado hasta Lassic, necesitas haber encontrado un cristal en el castillo anterior, a menos de que quieras que el equipo sea aplastado como una mosca.


Es necesario explorar cada rincón del juego para ganar, pero no es como si atravesar todos estos lugares sea fácil en primer lugar. Para decirlo sin rodeos, la dificultad es simplemente ridícula en varios puntos del juego. Es humillante cuando empiezas el juego con solo Alis con una espada barata que no quita más de un punto a los enemigos y ser vencido por los primeros que te encuentras con estos, por lo que es OBLIGATORIO entrenar muy cuidadosamente para subir unos niveles y tener una oportunidad contra los escorpiones y murciélagos que aparecen al dar tus primeros pasos fuera de la ciudad. Los enemigos gradualmente aparecen en hordas mucho más numerosas y son más fuertes en general, lo cual sumado a que estas expediciones tienden a ser muy largas (con pocos lugares para curarse) y que en el inventario no se puedan almacenar tantos objetos curativos, hacen que uno tenga que prepararse mucho a menos de que piense terminar como el hermano de Alis. Las mazmorras 3D, aunque sean hermosas de ver, también resultan muy difíciles de navegar porque se repiten los fondos y es fácil perder el norte, por lo que es necesario hacer uso del compás (que se obtiene muy temprano en el juego) y trazar tu propio mapa (claro, a menos de que hagas como yo y busques mapas por internet). A veces ni siquiera es suficiente con explorar minuciosamente estas mazmorras, porque estas también tienen puertas secretas que no son visibles normalmente para el jugador (así de injusto llega a ser este juego).


Aun así, yo me imagino lo apasionante que debe haber sido descifrar todo el juego y dedicarle horas para pasarlo. El averiguar cada cosa por tu cuenta es algo que los RPG han perdido con los años, siento que muchos de estos guían al jugador para todo lo que tenga que hacer, así como poner un gran énfasis en el diálogo y tramas llenas de clichés de anime (ya saben, todas esas cosas sobrevaloradas). En este punto de la historia de los juegos RPG se espera que el jugador esté atento y dispuesto a explorar y descubrir cosas por sí mismo. Por ello, es un poco difícil recomendar este juego a los jugadores modernos. Diría que es el que menos recomiendo de toda la tetralogía. Dicho todo esto, Phantasy Star sigue siendo un grandioso juego en todo sentido, uno que si bien no hace exactamente nada que no se haya visto en los videojuegos para ese entonces, perfecciona la fórmula de los JRPG contemporáneos y ofrece un mundo encantador y una experiencia sumamente satisfactoria si logras tener la paciencia para completarlo. Claro que hay cosas que se podrían mejorar, y muchas de estas mejoras las veríamos en sus secuelas, pero esta primera entrega es ESENCIAL si quieres disfrutar y comprender por completo todo el lore y fundamentos de la saga.


Y no, no voy a dar un puntaje a este juego y a ninguno de las secuelas por venir, simplemente porque con lo que dije creo que es suficiente para enaltecer esta saga. Esto quizás sea un pequeño spoiler para las reseñas por venir de esta saga, pero cada entrega de esta tetralogía me parece excepcional a su manera por lo que todas estas reseñas serán bastante positivas. Por mientras, será mejor que empiece otra partida de cierta secuela lanzada para la Mega Drive

viernes, 10 de diciembre de 2021

Death Note (Películas)


Pocas cosas me parecen más representativas del fenómeno de la cultura otaku en occidente que Death Note. Recuerdo lo fascinante que era para mí aprender de los diferentes fenómenos y subculturas formados en el internet hispanohablante por ahí en mis primeros años incursionando en este a finales de los 2000s, incluyendo las inquietantes y grotescas parodias subidas al primigenio YouTube, los intentos de hacer pequeños cuentos de terror conocidos como creepypastas, y por supuesto, los otakus. Cualquiera que haya sido parte de la cultura otaku desde esa época puede decirte con toda seguridad que siempre ha habido un estigma contra los que forman parte de esa subcultura en el internet hispanohablante por varias razones. Por cosas como los padres ignorantes y algunos religiosos descerebrados difamando a varias populares franquicias niponas como Pokémon y Dragon Ball, o simplemente por lo risible que es que unos jóvenes idolatren a personajes dibujados con proporciones deformes y apariencias tan grotescamente infantilizadas (los personajes de Lucky Star y Haruhi Suzumiya eran de lo más icónico de la comunidad otaku en esa época), aparte de que muchos individuos se hunden aún más con sus conductas de fanáticos y/o depravados.

Algo que una porción considerable de otakus han querido es que eliminar este estigma y que se reconozca al anime como un medio de entretenimiento capaz de mostrar historias profundas y complejas que incluso podrían rivalizar con la literatura o el cine. Mientras que muchas de las obras más populares de este medio como Dragon Ball y Naruto son mayormente conocidos por sus exageradas peleas y su peculiar toque humorístico y en muchos casos son mayormente populares por la nostalgia, otros quieren hacer más conocidas a obras con un temas más oscuros y profundos, un ejemplo de estos siendo Death Note, de Tsugumi Ohba y Takeshi Obata. Es un poco difícil para mí el señalar una época en específica en la que mi afición por el manga y anime haya empezado, pero recuerdo lo trascendental que fue para mí cuando finalmente decidí ver este anime, con todo el hype que portaba esta serie (y porque mi hermano mayor me rogaba que la viera). La comunidad otaku pintaba a Death Note como esta incuestionable obra maestra con personajes y temas tan profundos y una calidad narrativa que estaba a la altura de algo escrito por Shakespeare o Dostoievski o Cervantes o quien quieras. Y al menos mi reacción inicial fue realmente positiva, sí llegó a sorprenderme y gustarme esta estructura de conflictos con juegos mentales entre los personajes principales, era prácticamente como una serie de peleas pero sin peleas. Adoraba otras cosas como lo enfocada e impredecible que era la trama, la estética y diseños góticos, y por supuesto también la excelente calidad de la animación y la asombrosa banda sonora – tanto así que no tardó en posicionarse como mi anime favorito, aunque de todos modos no había visto muchos.

A pesar de lo mucho que me gustó Death Note, esta no consiguió despertar el interés para mí en el medio o en volverme otaku. ¿A qué se debe esto? Al hecho de que justamente después de eso incursioné por primera vez a Super Sentai con Choujin Sentai Jetman e inmediatamente me volví fanático de la franquicia y aficionado al tokusatsu en general. (¿A emestraiker le gusta más los superhéroes que los animes? Qué ñoño.) Me gustó Jetman mucho más que Death Note y pasé el resto del año y los años por venir viendo series tokusatsu sin dejar mucho tiempo para ver otras series que no sean de ese género, por lo que Death Note permaneció como mi favorito por todo ese tiempo. A finales de 2015 –el mismo año en el que vi Death Note y Jetman– también incursioné en el mundo manga, y tras leer la obra que sería mi favorita (la cual revelaré más adelante en el blog), me volví un ávido lector de mangas. He estado leyendo mangas diariamente desde ese entonces, y encontrando obras que me han sorprendido y han elevado mi opinión hacia este medio de entretenimiento. A principios de este año opté por leer otra obra hecha por los mismos autores de Death Note: Bakuman. Para ese entonces ya había leído un montón de mangas que me parecieron decenas de veces mejores de lo que fue Death Note y quería ver si otra obra de ellos me haría revaluar el potencial narrativo del autor, y eso justamente hice. Obviamente noté varias similitudes entre Bakuman y Death Note, especialmente en la abundancia de dialogo y los juegos mentales; y a pesar de que considero a Bakuman como un manga bastante disfrutable, debo decir que hubieron muchas cosas que no me gustaron de esta y que varios de estos problemas también estaban presentes en Death Note. El punto es que Death Note ya no tiene ese estado tan prestigioso que tenía para mí y admito que sí tengo varios problemas con esa serie. Como mi interés por la saga de Death Note ha resurgido este año, decidí ver las varias películas adaptaciones cinematográficas hechas a esta obra. Y oh sorpresa, también tengo un montón de problemas con estas.

Death Note (2006)



Al momento de evaluar una película basada en un manga, el aspecto principal en el que la gente suele enfocarse es en qué tan fiel es el guion a la historia de la obra original. Como el manga y el anime de Death Note son especialmente reconocidos por tener una historia tan elaborada e interesante con un ambiente más realista que tu shonen promedio, en teoría lo único en el que la adaptación podría salir mal sería en la forma en la que es filmada y presentada, ya que la historia es presuntamente perfecta. Digo, es la historia sobre cómo el brillante estudiante Light Yagami encuentra una libreta con el poder de matar a cualquier individuo con solo escribir el nombre de este y conocer su rostro. Con este artefacto a su disposición, Light se dispone a matar a todos los criminales existentes para supuestamente salvar al mundo. Pero no solo eso, Light no se conforma con aniquilarlos, sino en hacer que el mundo sepa de la existencia de que hay alguna entidad que busca acabar con todos los criminales, dando así la creencia –e incluso adoración por parte de algunos– de la identidad apodada anónimamente como Kira. Sin embargo, la policía hace un procedimiento para dar con la identidad de esta enigmática figura, llegando a contratar a alguien tan inteligente, excéntrico y misterioso como el sujeto al que buscan, L. Con ayuda de este individuo, la policía no tarda en localizar el posible paradero de Kira, y cada vez acercándose a revelar a Light Yagami como el principal sospechoso. De ahí, se crea una especie de juego del gato y el ratón entre los dos genios de la serie, con Light usando varios planes muy ingeniosos para engañar a la policía de que él no es el sujeto que buscan.

La premisa, la forma en la que se desarrolla la trama con la interesante rivalidad de estos dos genios, y los personajes han sido tan aclamados y considerados de lo mejor de todo el manga y anime. Ahora deben estar preguntando, ¿qué parte en específico hizo que recientemente discrepas con esta noción? Pues definitivamente no fueron los dos primeros puntos (al menos no por completo), sino la parte de los personajes, empezando con el protagonista Light – quien también es considerado como uno de los mejores villanos del género y uno de los más inteligentes, y especialmente no estoy de acuerdo con esto último. Lo más desagradable de este personaje no solo me parece su actitud egocéntrica y pedante, sino que también me parece alguien muy pretencioso y elitista que no es ni de cerca tan listo o “superior a los demás” que piensa que es. Es como uno de esos adolescentes amargos que piensan que son el centro del mundo y guardan rencor a todos los demás, y su creencia de que puede y tiene el derecho de matar a todos los criminales con el propósito de hacer “justicia” me parece completamente errada e infantil – simplemente porque eso obviamente nunca va a acabar con el crimen. Recuerdo la frase que Abrera dijo en su confrontación final con los Dekaranger: “No importa si me matan, mientras existan personas como yo en el mundo, el crimen nunca desaparecerá. Siempre que exista la codicia, alguien vendrá para tomar mi lugar.” Y realmente está en lo cierto, aunque duela decirlo. Mientras la gente tenga la opción de hacer maldades, siempre van a haber individuos que lo van a hacer, porque los humanos no somos perfectos y nunca lo seremos. Matar a los malhechores no cambiará el hecho de que el crimen ya está hecho, y la única forma de evitar el crimen por completo sería matarlos antes de que estos puedan cometer los crímenes, pero si hicieran eso entonces tampoco tendrían la oportunidad de hacer cosas buenas, o cualquier otra cosa. Y por eso existen las leyes. A pesar de que muchos lo catalogan como un personaje moralmente gris, es de hecho bastante obvio desde el principio que Light es un megalómano psicópata, ya que él asesinó muy impulsivamente a Lind. L Taylor (pensando que era el verdadero L) solo porque creía que este se interponía en su objetivo a pesar de que L, hasta donde él sabía, no había hecho nada malo. Esto también demuestra que Light tampoco es tan listo como muchos lo pintan, ¿por qué en ese momento no esperó hasta graduarse y viajar a otro país y retomar su plan desde ahí? Pero no, tuvo que tomárselo como algo personal y seguirle el juego a L, estando tan confiado de que podría vencerlo. En Death Note los personajes parecen inteligentes solo porque el autor nos dice que lo son – hay un montón de otras pésimas decisiones tomadas por los personajes y conveniencias argumentales.


Que el guion sea tan fiel al de la obra original significa que estos problemas también están presentes en este producto, sin embargo, ¿qué hay de los otros aspectos de la película? ¿Qué tan buena es plasmando visualmente la historia? ¿Qué tal es como otra película J-horror? La verdad es que la primera vez que vi la película tuve una fuerte impresión de que los que la hicieron no se la estaban tomando enserio. Las muertes de los criminales son actuadas como si fuese una actuación de estudiantes de secundaria, tan sobreactuada e inconvincente. Ya de por sí estos asesinatos no eran exactamente violentas o impactantes en la obra original porque estos mueren de la forma menos violenta posible (con un ataque cardíaco), pero la película también muestra a los criminales de una forma tan deshumanizada como personas que hacen el mal solo porque quieren, lo cual hace resaltar más lo mucho que la obra original falla en explorar el debate filosófico si está bien o no matar criminales.

Las actuaciones por parte de todos los extras dejan mucho que desear, y la verdad no es como si los actores principales sean mucho mejores. La mayoría de las actuaciones son dignas de una serie de televisión, y hay unas cuantas decisiones del casting que podrían haber sido mejor. Si bien ya he dejado en claro que no soy fan del personaje de Light Yagami, debo decir que el actor Tatsuya Fujiwara no fue la mejor elección para interpretarlo. Simplemente no me parece que Fujiwara tenga la presencia o la malicia necesaria para mostrar lo siniestro que debería ser Light. Creo que esta percepción por mi parte también se debe a los otros personajes protagónicos que interpretó Fujiwara que he visto anteriormente, digo, me gustó su actuación como Shuya Nanahara en Battle Royale y como Kaiji en la película homónima – en esas películas Fujiwara hizo de personajes mucho más tranquilos y bonachones a los que les quedó muy bien su apariencia y actuación. Por otra parte, Kenichi Matsuyama hizo un espléndido trabajo como L, capturando todo desde su apariencia hasta todos sus gestos, su apariencia y presencia.


A pesar de que no me guste mucho la forma en la que la película ha presentado la historia original, tengo que reconocer que el guion por lo menos adapta muy fielmente la historia. Muchas de las jugadas de Light y L sí fueron muy interesantes de ver, por lo que ese punto positivo se mantiene en la película, definitivamente creo que por lo menos hubiese considerado a esta película como medianamente entretenida aun si no hubiera visto el material original. No obstante, el guion de la película difiere con el de la historia original alrededor de la última cuarta porción de la película, lo cual a mi parecer fue un cambio para bien y estuvo bien ejecutado. Una de las partes más criticadas de Death Note ha sido su pésima forma de tratar a sus personajes femeninos (volveré a este punto en un rato), y uno de los peores ejemplos de eso había sido con el personaje de Naomi Misora. En la historia original ella era una muy apta agente del FBI que estuvo cerca de delatar a Light, pero Tsugumi Ohba tuvo que deshacerse de ella haciendo que esta sea fácilmente engañada por Light en un solo encuentro. Aquí no es tanto así, aquí Misora no le da su identificación a Light, sino que este lo consigue de otra parte y además hace un plan más elaborado para montar toda una escena en la que ella termina matándose a sí misma… ahora que lo pienso, no es un mucho mejor destino, pero podría decirse que aquí ella fue un poco más formidable.

En un principio tenía altas expectativas por esta adaptación, especialmente por el director Shusuke Kaneko, a quien recuerdo por su magnífico trabajo en películas kaiju como la trilogía de Gamera y GMK, estando a cargo de ésta. Los ángulos de cámara en las escenas con Ryuk y la iluminación fueron bien trabajadas, pero como ya dije, me sorprende lo vergonzosas que son las escenas con los personajes humanos, como si pensara que esta es una película para niños y tenga que censurar e infantilizar todo lo que pueda asemejar a esta película con la realidad. Sé que esto sonará como un deseo de fanboy pero, creo que la película hubiese estado mucho mejor con un director más dedicado, y el que me parece más capaz de adaptar una obra como esta es Takashi Miike, quien anteriormente había hecho un espléndido trabajo mostrando a un personaje sanguinario con trastornos mentales en Audición (1999), y había adaptado bien la exploración a la mente criminal en la adaptación a película del manga Ichi The Killer.

Valoración: 5/10

Death Note: The Last Name (2006)



He visto esta práctica en muchas películas japonesas, que la secuela salga apenas unos meses después y con exactamente el mismo equipo de producción, siendo ambas partes prácticamente una misma película. Sucedió con las peor recibidas adaptaciones de Shingeki no Kyojin de Shinji Higuchi, e incluso con algunas producciones Hollywoodenses, demostrando que están seguros del éxito de la primera película como para dividir el mismo producto en dos partes y venderlos por separado. Nunca me gustaron las películas demasiado largas, siempre sentí que verlas eran prácticamente maratonear una serie en vez de ver una película. En el caso de esta película y la anterior, verlas se siente como ver varios episodios de una serie seguidos, lo cual es más reforzado por el estilo de narración lleno de melodrama y suspenso. Pero solo se puede abarcar cierto punto de la historia en una película antes que esta se vuelva demasiado larga. Por ello, la primera parte adaptó la historia hasta la derrota de Naomi Misora, mientras que esta abarcaría el resto, aunque haciendo unas cuantas omisiones notables.

Antes de pasar a las distinciones de la película con la obra original, tengo que hablar de un aspecto de la historia original que recientemente me ha incomodado, y que también está en esta adaptación – hablo del personaje de Misa Amane. Ya he dicho que Death Note no es una obra que particularmente trate bien o entienda a las mujeres, pero hay veces en las que hasta parece como si los autores directamente las despreciaran. Misora pereció ante el protagonista masculino como si nada, ¿pero qué pasa cuando tenemos a una chica como personaje de apoyo en vez de una antagonista? Pues ahí tenemos únicamente a Misa Amane, quien también posee una Death Note, un compañero shinigami, y está de parte de Kira. Recuerdo que cuando vi el anime por primera vez estaba emocionado por ella, quería ver que podría aportar a la dinámica – quizás como una rival para Light, haciendo jugadas por ella misma. Sin embargo, Misa fue todo lo opuesto a lo que me imaginaba. Puedo describir a Misa como un personaje hecho para complacer a los adolescentes inadaptados. Al descubrir que Kira fue el que asesinó al criminal que mató a sus padres, ella se vuelve irracionalmente devota hacia él. Incluso después de conocerlo en persona, ella está dispuesta a hacer todo lo que Light le ordene, sin importar lo horrible que sea. A lo largo de la historia de Death Note, ella le entrega su libreta a Light en más de un par de ocasiones, hace el trato de los ojos de shinigami que reducen el tiempo de vida restante a la mitad dos veces, y también llega a estar cautiva por un tiempo y perder la memoria. De ahí no hay mucho más que decir del personaje, ella no puede pensar por sí misma y solo está como una herramienta más para los planes de Light.


Para ser honesto, no es como si odiara a Misa o algo así. Ella me pareció poco interesante pero inofensiva al final del día (y al menos en esta película, creo que la actriz Erika Toda hizo un trabajo decente). Pero el problema viene cuando consideramos lo que le pasa a los otros personajes femeninos de la historia y los papeles que tenían que desempeñar en la historia. Ya hablamos de Misora –quien fue derrotada miserablemente– y también están por ejemplo… la madre de Light (quien podría omitirse de la historia sin ningún problema) o de la hermana menor Sayu, quien más adelante también es usada como rehén. Compáralo con el papel que desempeñan todos los personajes masculinos en contraste: todos los genios son hombres (Light, L, Near, Mello), todos los miembros de la policía son hombres, así como todas las figuras de autoridad (no me digan que por lo menos no pudieron darle el papel de policía como Matsuda o Aizawa a una mujer). Sé que parece que estoy pensando demasiado en este punto, pero luego de leer Bakuman –la obra posterior a DN de los mismos autores que de alguna forma llega a ser más explícitamente misógina– no puedo evitar sentirme algo incómodo con lo que piensan los autores sobre las mujeres.

Los otros aspectos de la película como las actuaciones, la calidad de efectos especiales, y el ritmo están al mismo nivel de la anterior (es decir que también dejan mucho que desear). Sin embargo, la historia esta vez tendría más diferencias con la historia original. Luego de la parte en la que Light y Misa son liberados y deciden ayudar a la policía a capturar a Kira, el arco de la corporación Yotsuba es reemplazado con Kiyomi Takada de Sakura TV como la tercera Kira, con ella desempeñando exactamente el mismo rol que Higuchi tenía en la historia original. Este quizás sea de hecho un cambio desafortunado, ya que esto añade más al problema de cómo tratan a los personajes femeninos en la historia. Por otro lado, el mayor cambio es la omisión de todo el arco de Near y Mello de la historia original siguiendo la muerte de L. En esta adaptación, L es el que termina revelando a Light como Kira, y la forma en la que lo consigue estuvo bien elaborada. Originalmente Light había escrito una regla falsa en la Death Note en la que el portador moriría si no escribe nombres en ésta por unos días, convenciéndolos de que él no podría haber sido Kira ya que estuve cautivo por un tiempo y forzando a Rem a matar a L. Aquí, L hace un mayor sacrificio para probar la veracidad de esta última regla al escribir su propio nombre y programar su muerte dentro de 23 días, de esa forma evitando ser matado en ese lapso y probando que Light sí era Kira. Esto fue una muy sensata decisión ya que así se evita ese último tercio de la historia que no fue del agrado de muchos y consigue darnos un final original y suficientemente satisfactorio. Aún mantengo mi opinión de que algunos miembros del elenco y el director no fueron los mejores que pudieron elegir, pero tengo que admitir que la escena final con Light muriendo en los brazos de su padre sí fue muy emotiva, como también lo fue la escena final en la que L agradece a Soichiro por trabajar con él antes de morir. Solo por estas pequeñas escenas considero que esta película es un poco mejor que la anterior, pero los problemas siguen siendo demasiado graves como para darle un puntaje positivo.

Valoración: 5/10

L: Change the World (2008)



El spin-off de L. Una producción hecha a partir de la continuidad de las dos películas anteriores, presentando una historia no ideada por los autores originales. Ya he dicho que Kenichi Matsuyama interpretando a L fue posiblemente lo mejor que salió de estas adaptaciones, y tener una historia más enfocada en él no es completamente una mala idea. El concepto de L teniendo que resolver un último caso en su lapso de 23 días antes de su muerte suena interesante… y ese es el último aspecto positivo que puedo decir de esta película. La trama me recuerda mucho a esas soporíferas películas de espías del siglo pasado combinado con el típico plan de villanos de un arma biológica en forma de virus vista en centenares de películas de ciencia ficción. Luego del estilo de misterio y thriller policial de sus predecesoras, este plan y los antagonistas se ven tan tontos y poco interesantes en comparación, haciendo a esta película una tediosa e intrascendente experiencia de más de dos horas…

Dicho esto, puedo entender el razonamiento e intención de los creadores de este spin-off. Una pequeña historia aparte para explorar más al personaje de L, con este tratando de entender y enseñar a sus sucesores, con una gran parte de la película enfocándose en escenas que muestran a L aprendiendo de estos y formando lazos emocionales con ellos, aun estando en sus últimos momentos. Supongo que puede ser algo especial ver un poco más de “humanización” al personaje y seguro que algunos lo apreciarán, pero todo este rollo me parece innecesario porque el final de la película anterior ya nos había dado algo como eso cuando L se despide de Soichiro, y no es como si dejar algunos detalles de su historia como un misterio estén mal en primer lugar. Con todo esto dicho, esta película me parece totalmente redundante y mucho menos interesante y entretenida de lo que debería haber sido para justificar su existencia.

Valoración: 4/10

Death Note: Light up the NEW world (2016)



No tengo idea de cómo no llegué ni ha oír de esta película en su momento, siendo que para ese entonces estaba muy interesado en esta franquicia y hay un par de nombres en esta producción que sí reconozco. La premisa de por sí suena muy ingeniosa y tiene mucho potencial – sobre varias libretas cayendo en el mundo humano, con cada una de estas encontrando nuevos portadores para que se libre una especie de Battle Royale entre estos, todo eso transcurriendo en un mundo en el que la Death Note ya había sido usada y haya afectado a la sociedad. La verdad es que esta premisa suena mucho más interesante de lo que la película realmente ofrece. Realmente quería que me guste esta película, pero esta resultó ser una experiencia sumamente desagradable.

Para empezar, los personajes son de los más molestos y antipáticos que han podido existir en toda la saga. A pesar de que hayan caído seis libretas y estos sí hayan conseguido portadores, la mitad de estos no tienen casi nada de relevancia o participación en la historia y son desechados ni bien empieza la película, incluyendo algunos que hubiesen sido interesantes de ver como Teru Mikami y Sakura Aoi (y el Near de la película anterior no aparece ni es mencionado). En su lugar la historia se centra en solo tres personajes principales: Ryuzaki, un sucesor de L sin nada de su carisma y que resulta ser completamente pedante y antipático; Mishima, un investigador de la policía aburrido y unidimensional; y Shien, el cursi “sucesor” de Kira que sirve como antagonista. La película se hace tan pesada por el simple hecho de que esta falla en hacernos apoyar a cualquiera de estos personajes.


La trama tampoco es mucho mejor. A decir verdad, la historia carece del factor sorpresivo de las jugadas interesantes que estaban presentes en sus predecesoras, ya que las que esta presenta son simples copias de las que estaban en la historia original. Por ejemplo, por el final de la película hay un giro argumental en el que se revela que Mishima había sido un sucesor de Kira y que todo este tiempo había tenido esa “amnesia” por haber renunciado a la Death Note como parte de su plan, cosa que Light ya había hecho en la historia original. Y posteriormente al clímax nos presentan otros giros inesperados en los que Ryuzaki no había sido asesinado por la Death Note porque su nombre ya había sido escrito anteriormente (de forma similar a lo que hizo L al final de la segunda película) y este le pasa el título de L a Mishima para que busque las libretas restantes o un sinsentido como ese – es todo un enredo y no aporta mucho en ese punto de la historia.

Aun así, hay unos cuantos puntos positivos de la película que creo que en vez de redimirla, hacen desear que estos hayan estado en una mejor producción que ésta. La dirección de Shinsuke Sato nos da un montón de excelentes tomas, una atmósfera apropiadamente oscura, y un impresionante trabajo de efectos especiales. Tanto Ryuk como los otros dos shinigamis –Beppo y Arma– tienen diseños mucho más detallados y aterradores que en sus predecesoras, y el CGI usado para mostrarlos también estuvo muy bien trabajado, ahora mezclándose mejor en las escenas gracias a la minuciosa iluminación en estos. También se agradece el regreso de algunos de los actores de las películas anteriores, como Tatsuya Fujiwara para el último video grabado de Light; y Erika Toda como Misa, quien en esta película tuvo un papel menor pero al menos resulta interesante ver cuánto ha cambiado desde el final de la última película. Lástima que todo este material haya sido desperdiciado en un pésimo fanfiction convertido en película.

Valoración: 4/10

Death Note (2017)



Como una gran parte de los fans, yo nunca tuve altas expectativas o estuve emocionado por la adaptación de Netflix de Death Note. Yo ODIO todo lo que tenga que ver con Netflix, y todos sabemos que estas adaptaciones estadounidenses tienden a ser un asco y mutilar todo el atractivo de la historia original – dándonos productos hechos cínicamente por bastardos codiciosos que no tienen nada de respeto por el material original. Gracias a esto y a la recepción abrumadoramente negativa decidí ni molestarme en ver la película, tenía mejores cosas que hacer. Luego de haber madurado por todos estos años y haber estado insatisfecho con las adaptaciones cinematográficas anteriores de esta obra… realmente quería por lo menos entretenerme viendo esta película.

Y saben, esta adaptación es exactamente lo que visualizaba. Con esto quiero decir que tiene todas las fallas que puede tener una adaptación gringa, incluyendo el cambiar muchos aspectos cruciales de la historia original, pero que a pesar de eso llega a fascinar y entretener como una interpretación diferente del material original. Como hay tantas cosas que me disgustan de la historia y personajes de Tsugumi Ohba, que este producto ofrezca personajes y una trama diferente no me disgustó tanto. El protagonista Light Turner no es exactamente un personaje muy bien escrito (o actuado), pero es refrescante por lo diferente que es comparándolo con su contraparte de la historia original. Light Turner es alguien más ordinario y un marginado social, en comparación del genio con una familia perfecta con el que estamos acostumbrados. Turner es como un nerd estereotípico de un drama adolescente americano, alguien que sobresale en lo académico pero que no es particularmente popular entre sus compañeros y que de hecho guarda rencor hacia estos y se cree superior a ellos por su presunto intelecto. Él inicialmente sí se asusta al ver a Ryuk y descubrir el poder de la libreta –siendo su primera víctima justamente uno de sus compañeros al que le tiene odio– y su motivación para usar la libreta para asesinar criminales se siente más personal, siendo que su madre había sido asesinada por un criminal. Turner tampoco es completamente un idiota, de hecho creo que algunas de sus estrategias (como el hacer que parezca que Kira reside en Japón) no estuvieron nada mal.


En cuanto a los otros personajes: L es probablemente el más similar al de su contraparte original, siendo un enigmático y aterradoramente inteligente investigador que consigue desmantelar muchas de las estrategias de Kira, aunque diría que este es más impulsivo emocionalmente y *un poco* menos inteligente, pero cumple el rol de antagonista lo suficientemente bien. (Muchos se quejan de que L sea negro, pero no que Light no sea asiático, ¿racismo?) Por otra parte, la que más se diferencia de su contraparte original, tanto en caracterización como en desempeño en la historia, es Mia Sutton (Misa). Aquí, Mia es casi lo que yo originalmente creía que Misa sería, otra portadora de la Light que antagoniza a Light… más o menos. Este es uno de mis mayores problemas con la película, que Light y Mia tengan que empezar como una típica pareja de adolescentes para forzar un montón de grotescas escenas de intimidad que nadie quiere ver, solo para que después vayan a forzar la discordia entre estos que finalmente los llevaría a enemistarse. Si bien la obra original tenía algunas cosas reprochables que en su país son indignantemente aceptadas (el machismo), no es como si esta adaptación gringa esté exenta de sus clichés y momentos lamentables.

No solo eso, el debate sobre matar criminales tampoco es explorado aquí, con la película sólo buscando causar shock a la audiencia con estrategias jaladas de los pelos y mucha violencia, obviamente esta película da menos de qué hablar que el material en el que está basado. Por lo menos, hay unas cosas que esta adaptación estadounidense tiene que a sus predecesoras japonesas les hacía falta, y una de esas es cojones. Ya dije que algo que me molestó de las películas de Kaneko era lo infantiles que las había hecho, especialmente por la forma tan caricaturesca que hacía las muertes de los criminales. El filme de Adam Wingard por otra parte, compensa en grande la falta de crudeza de la obra original con varias muertes sumamente gráficas, logrando que esta película sea catalogada como gore (muchos comparan las muertes con las vistas en la saga Destino Final, de la cual también soy fan). La banda sonora con su estilo de música industrial –compuesta por Atticus Ross y Leopold Ross– también fue de mi agrado.

Podría enumerar muchos puntos negativos de la película (como las actuaciones), pero creo que dejé en claro que no soy de los que la odian al punto de amenazar al director. Esto quizás se debe a que no tengo el mismo nivel de estima hacia la obra original que otros y porque al final del día solo quería que la película por lo menos entretenga, y en eso no falló tanto. (Y eso, siento que últimamente he perdido paciencia con malas películas.)

Valoración: 5/10

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Una de las cosas que he notado al ver todas estas adaptaciones es lo poco creíble que resulta la premisa de Death Note en general. Muchos la llaman una serie más realista y madura sin nada de ironía, aún si esta sigue siendo un shonen de Shonen Jump dirigida a adolescentes. La exagerada forma en la que es desarrollado el caso, lo fantasioso que ya es todo el rollo de los shinigamis – todo se ve menos coherente cuando lo muestras con personas de carne y hueso. Aun así, diría que sí me considero un fan de Death Note. El anime por lo menos creo que es excelente en varios aspectos (las canciones, la animación, lo fiel que es a la historia original), por lo que por eso y por lo verdaderamente ingeniosa que ha sido la trama de esta indiscutiblemente formidable obra admito que ha sido importante para mí (como para ver todas sus películas y dedicarle una entrada). Tan importante de hecho, que es una de las primeras veces que he leído un manga principalmente porque ya conocía otra de las obras de los autores. (¿Se viene también la reseña de Bakuman? Eso sería divertido…)